La obesidad y el sobrepeso son importantes factores de riesgo para la diabetes tipo 2. La relación entre estas patologías es tan estrecha que se ha dado lugar al término de diabesidad. ¿Cómo se produce la evolución de obesidad a diabetes tipo 2?

La incidencia de obesidad y diabetes tipo 2 en el mundo está creciendo de manera alarmante, según la OMS (Organización Mundial de la Salud):
  • En 2014, el 39% de las personas adultas de 18 o más años tenían sobrepeso, y el 13% obesidad.
  • La prevalencia mundial de diabetes ha pasado de un 4,7% en 1980 a casi el doble, un 8,5%, en 2014.

La obesidad es uno de los más importantes factores de riesgo a la diabetes tipo 2 (junto a la edad, la predisposición genética y el sedentarismo).

De obesidad a diabetes tipo 2

Según este reciente estudio, tanto la predisposición genética como el envejecimiento tienen un importante papel en la diabetes tipo 2, pero raramente se manifiesta sin una ganancia de peso. La evolución de obesidad a diabetes tipo2 se debe a un fallo progresivo de la producción de la insulina que coincide con un progresivo aumento de la resistencia a la insulina:


Fallo en la producción de insulina:


Cuando una persona tiene sobrepeso u obesidad su cuerpo necesita producir más insulina para llevar la glucosa a las células que forman su tejido adiposo y el páncreas tiene que producir más insulina para mantener la glucosa en sangre dentro de los niveles normales. Este sobreesfuerzo provoca fatiga en el páncreas y la consiguiente reducción de capacidad de producción de insulina.
Resistencia a la insulina:
El exceso de peso puede producir una resistencia a la insulina, las células reducen la sensibilidad, no responden, a la insulina y la glucosa no puede entrar en ellas. Un aumento de grasa general, y más concretamente de los depósitos de grasa visceral y ectópica (grasa abdominal) está específicamente asociado con esta resistencia a la insulina.

Pautas para prevenir

Controlar el exceso de peso y reducir la grasa localizada en la zona abdominal es vital para reducir la probabilidad de desarrollar diabetes tipo 2 y otras muchas alteraciones metabólicas asociadas. Una alimentación saludable y practicar ejercicio de manera regular es fundamental, porque ayudan a mantener un peso saludable y prevenir la obesidad y la diabetes tipo 2.
Para conseguir este objetivo puedes ayudarte de pulseras de actividad y aplicaciones móviles como DIABETESprevent con la que puedes programar tus retos, registrar tus avances y motivarte a seguir un estilo de vida saludable.

Itziar M. Ceberio, Patia Diabetes